El entorno de la actividad económica dentro de la cual se están enfrentando y deben desenvolverse las organizaciones comunitarias productivas y de servicios para el período pendiente para finalizar el presente siglo, que incorporan tanto el Movimiento Cooperativo como a las otras empresas asociativas organizadas, confrontan las condicionantes siguientes en las estructuras y sistemas tanto nacional como internacional: a) globalización de la economía; b) Liberalización de la competencia de las empresas y el comercio; c) eliminación de privilegios y subsidios; d) cambios sustantivos por la conclusión del proceso negociador de la paz. Los principios sociales de la participación del Estado y los cambios en su estructura hacia la modernización, tendrán que definirse con mayor precisión a partir de los principios de solidaridad y subsidiariedad. La concepción de un Plan de Desarrollo Cooperativo debe descanzar sobre bases sólidas y objetivos y metas viables. En este entendido, a continuación se presentan los objetivos, la estrategia (políticas y acciones prioritarias) y las actividades complementarias sugeridas. El objetivo último que se persigue es el perfeccionamiento y la expansión del movimiento cooperativo guatemalteco, a fin de que se constituya en un actor trascendental para el desarrollo económico y social, con la participación activa de los asalariados, campesinos, pequeños empresarios y artesanos. Además, el movimiento cooperativo debe desarrollarse con identidad propia, y su naturaleza debe ser congruente con los valores y la realidad de la sociedad guatemalteca.