Discurso pronunciado por el Arzobispo de Guatemala, Monseñor Próspero Penados del Barrio, ante la Reunión de los Presidentes de las Repúblicas de Centroamérica en la "Cumbre" llamada Esquipulas I. El orador hace una definición de la paz y de las precondiciones políticas y sociales para alcanzarla. Explica también que para lograrla se requiere un deseo sincero y honesto, sin demogogia. No hay paz sin justicia ni justicia sin libertad; pero esa coexistencia de justicia y libertad sólo puede darse en un ámbito de total verdad. La paz que debe buscarse en Centroamérica está basada en transformaciones urgentes que propicien esa justicia y esa libertad.